martes, 26 de abril de 2016

Mantra para un bebé ángel




Estas palabras están dedicadas con mucho amor y respeto a L. y a todas aquellas mamás que perdieron un bebé por nacer; esperando que el dolor pese un poco menos.

Te soñé, sentí, acuné. Te nombré. Cerré los ojos y hasta te vi. Tibio. Un corazón diminuto latiendo al compás del mío ¿Te acordás? Llegaste ese día para modificar mi vida para siempre. En estas cosas no hay retorno: el amor es así, te atraviesa. Lo que toca el alma trasciende y habita en algún lugar, aunque a veces sea un lugar olvidado y desconocido. De algún modo seguís acá, presente en cada caricia, en cada palabra, en cada recuerdo y en cada paso. Presente. Para siempre. Porque si los hijos nos enseñan a amar incondicionalmente, vos llevaste esa enseñanza hasta el infinito. Gracias por el tiempo que compartimos. Gracias por elegirme.
Mamá